domingo, 5 de mayo de 2013

XVII Ciclos de Música de las Tres Culturas




Hace algo más de una semana que terminaron los Ciclos de Música de las Tres Culturas en Córdoba y lo han vuelto a hacer dejando el listón muy alto. Año tras año, (y desde 1997 ya van 17 ediciones) la ciudad alberga uno de los certámenes más importantes de música antigua de toda Andalucía (y si me apuran de España). Un evento basado en conciertos de grupos con diversas influencias musicales que se desarrollaron en la península ibérica en tiempos de Al-Ándalus. Músicas presentes en las tradiciones hispano-visigodas del norte de España, en la cultura árabe localizada desde Oriente hasta el Magreb o en las comunidades judías repartidas por toda la península. Un nexo musical conseguido, en gran medida, por la pulcritud de su programación que nos teleporta directamente a una época donde, Al-Ándalus, fue el epicentro cultural entre Oriente y Occidente .

Como viene siendo habitual, la celebración de los ciclos ha vuelto a ser en la sala Orive, junto a los jardines del palacio con el mismo nombre. Un lugar idóneo para disfrutar de las muchas formaciones que han ido pasando por el certamen cada fin de semana desde el 5 al 27 del pasado mes de abril. Sonidos venidos de otra época a través de  instrumentos olvidados que sólo unos pocos, saben todavía hacerlos sonar. Toda una experiencia exclusiva para el espectador ávido de melodías perdidas en los anales del tiempo y la historia.
Sala Orive

En referencia a su programación oficial, se observa que las denominadas tres culturas (cristiana, árabe y judía) que dan nombre al certamen, están presentes en una o en otra formación de entre las ocho que han sido elegidas para esta XVII edición. Todas ellas, cuentan con una raíz histórica común aunque con un estilo y procedencia diferentes entre sí. Razón por la cual, el público ha tenido la ocasión de asistir a diferentes conciertos cada uno de ellos con una identidad propia.

Uno de los motivos diferenciadores de estos ciclos ha sido el marcado carácter divulgativo que tienen sus conciertos, ya no sólo se trata de disfrutar de buenos músicos y melodías evocadoras, se pretende enseñar a la gente la música de la época, los instrumentos y el entorno sociocultural de por aquel entonces.

Juan Manuel Rubio "Finis Mundi"
Para explicar ésto, me quedo con la actuación del trío Finis Mundi (proyecto paralelo a Aquitania) del viernes 12. Una formación al más puro estilo del mester de juglaría. Fue precisamente eso: romances, trovas y cantigas del mundo de la caballería, interpretadas de manera excelente, con instrumentos de época y ese toque divulgativo entre canciones que anteriormente citaba. Todo esto es fácil hacerlo si dispones entre tus filas de músicos como Juan Manuel Rubio (zanfoña y viola medieval), representación viva del juglar del siglo XXI (estética incluida). El hombre se ganó el sueldo, ya no sólo tocando, dio una clase de historia, presentó y explicó cada uno de los muchos instrumentos que llevaban y por si fuera poco, hizo reír al respetable. Justo lo que entiendo yo por un juglar vaya. La formación la completaban Elena Escartín a la flauta de pico y el multinstrumentista Emilio Villalba al laúd medieval, el arpa y la viola de teclas. Al final del concierto, tuvieron el detalle de mostrarnos de cerca los instrumentos y aproveché la ocasión para hacerme una foto con ellos.

Otras actuaciones a destacar, fueron la del trío Saltana, de influencia arábigo-andalusí, donde el Kanun   de Youssef el Mezguildi hizo las delicias de más de uno y la de Moresca Emsemble bajo la dirección musical del excelente laudista sirio Hames Bitar acompañado de grandes músicos. Actuación esta última, acompañada de la danza de la bailarina y coreógrafa Lubna Shakti con la que me despido no sin antes agradecer a la Delegación de cultura del Ayuntamiento de Córdoba  todo el trabajo que hacen cada año para traernos este pedazo de certamen. Por ponerles un "pero" y en mi opinión, la promoción del evento no tiene la repercusión que merece y se queda en un triste segundo plano demostrando una vez más, lo mal que vende Córdoba cosas que bien merecen la pena . Por último, me gustaría animar al que me lea a que asista a la edición del año que viene, máxime si es joven, pues por desgracia, a pocos vi por allí. Como dijo un allegado mío: "Esto ni es gratis ni está en todos lados".



Con "Finis Mundi", de izquierda a derecha: Elena Escartin, Emilio Villalba y Juan Manuel Rubio.

Laud Medieval, viola de teclas, pandero, arpa gótica y Oud.

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