Absurdo y Grotesco
Enajenado,
Agoto la sangre y apuro la carne,
Me arrastro por escaleras
De reiteración y falsa abundancia
Mientras me quiebro la última costilla
Que parecía en su sitio.
Todo es absurdo, todo tan grotesco…
Me desespera
La falta de piel en la cara,
El hombre que vomita plomo verde,
Lo angosto de la escalera
O lo corto de mis piernas
En esta carcasa azul de tungsteno.
Todo es absurdo, Todo tan grotesco…
Adiós al mar de cobre en la garganta,
Al bosque de yeso en la laringe
Y a la galvanoplastia
De todos los huesos rotos.
